Marcos Rolando Padilla Preciado, de 27 años, conocido en Quinindé como “Tatú”, quien jugó en varios clubes de segunda categoría en el balompié ecuatoriano, colgó sus botines para siempre, porque dos certeras puñaladas acabaron con su vida el lunes pasado.
Tito Hernán Hurtado Preciado, hermano de Marcos, dijo a los agentes de la Policía Judicial que a las 07:00 él y su ñaño se dirigían a la parada de buses en Quinindé para dirigirse a Santo Domingo de los Tsáchilas, donde se desempeñaba como preparador físico del equipo Los Chavos, de esa ciudad.
De repente apareció su exmujer, Gloria Johanna Sevillano, conocida como “Muñeca”, quien supuestamente le propinó dos puñaladas en el costado derecho de las costillas.
El futbolista cayó al piso gravemente herido y fue trasladado hasta la sala de emergencia del hospital Padre Alberto Bufoni, de Quinindé, donde los galenos le dieron los primeros auxilios y lo estabilizaron.
Como el hombre estaba grave decidieron enviarlo al Delfina Torres de Concha, de Esmeraldas. Aquí los médicos lo intervinieron y pidieron a sus familiares que consigan dos pintas de sangre y cuando se aprestaban a operarlo, falleció en horas de la tarde.
Detenida
Los deudos del futbolista indicaron que la exmujer de Padilla fue detenida por la Policía de Quinindé. Al parecer, ella estaba en presunto estado etílico y gritaba que “si vuelve a nacer lo vuelvo a matar” y que “con cuchillo en mano nadie se le podía acercar”.
Ella fue trasladada hasta el Comando de Policía de Quinindé y posteriormente se la llevó hasta la provincia de Esmeraldas en calidad de detenida para precautelar su seguridad.
Llegó por las votaciones
Marcos Padilla se desempeñaba como preparador físico de una escuela de fútbol en Santo Domingo y vivía en esa ciudad en el barrio Juan Montalvo.
El futbolista llegó el sábado a Quinindé por la consulta popular y para visitar la tumba de su querida madre. Entonces se quedó hasta el lunes en casa de sus familiares, pero nunca sospechó que sería la última vez que estaría en su tierra natal.
Los restos del deportista están siendo velados en el barrio Cinco de Agosto de Quinindé, y su sepelio está previsto para la tarde de hoy. Marcos tenía algún tiempo separado de su exmujer con quien procreó dos hijos y en la actualidad tenía otro compromiso.
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