Dicen, que las demandas de “modificación de medidas”, vamos, las de “bajar la pensión” de alimentos a los hijos, de los cónyuges separados o divorciados, han aumentado por la dichosa crisis. (esa en la que todo cabe, y a la que todos culpamos)
Desde luego que en los últimos tiempos, las familias “rotas”, no tienen demasiado fácil unos pagar la pensión, y otros “bastante peor recibirla”, que no es para ellas, que es para los hijos de ambos, y estas personitas comen lo mismo, con crisis o sin ella.
Primero se inventan la “custodia compartida”; ah Dios mío, menuda utopía. Yo permítanme, y aunque comparto la bondad de esta para con los niños, permítanme reflejar mi escepticismo, considerando que es más difícil que funcione una guarda y custodia compartida, que un matrimonio. Ahora bien, aquí el falso no custodio, no paga, comparte lecho con quien quiere, y queda bien ante sus hijos. Pero otro resulta el paciente, por no decir el pagano, y como pagano, en todos sus aspectos.
Ahora se agarran a que como cobran menos o están en paro, tienen que reducir sus “escuálidas” pensiones (¿qué pasa que los niños no comen por estar en crisis?). Los cónyuges custodios, saben bien que no llega para nada con las pensiones establecidas, lo sabe, pero se hace el “longis”, el que debería de pasar la pensión, pero aun dice ¡a mí no me llega!, … ¿y a tus hijos?.
La mejor manera sería que unos meses de “custodia compartida”, los niños estuviesen con quien no suelen, pero !cuidado¡ con el mismo dinero, así se daría real cuenta de los milagrillos, y milagrazos que hace la otra parte.
Por cierto, y aun que duela a más de uno, la mayoría de las sufridoras, como siempre en esta vida, son las mujeres, las madres custodias. (aunque hay excepciones se pueden contar con …)
Decían que no había divorcios, porque con la crisis, no había dinero para pagar un proceso judicial, pero si lo hay para iniciar modificaciones de medidas y pretender pagar menos, contradicciones sociales. Si de verdad queremos ahorrar, deberíamos de ejercitar la paciencia, la tolerancia, y todo ello desde el AMOR, que fue el que nos unió, y no se termina, como la gasolina al motor, solo hace falta que sea verdadero y comprometidos y ¡atentos!, por las dos partes.
http://blogs.periodistadigital.com/josejaviersolabre.php/2011/05/08/divorcio-ipension-de-alimentos-
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