Victoria Eugenia Álvarez.
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Denuncia a su ex mujer por secuestrar a sus hijos
Miércoles, 17 de Noviembre, 2010
El Juzgado de instrucción número 4 de Gijón ha abierto diligencias contra una mujer acusada de haber huido con sus dos hijos, un niño y una niña, en septiembre de 2009, tras presentar una denuncia falsa contra su marido por abusos sexuales contra la pequeña. Victoria Eugenia Álvarez se encuentra en paradero desconocido desde esa fecha y sobre ella pesan dos presuntos delitos: de sustracción de menores y de desobediencia a la autoridad judicial. Según han podido esclarecer las investigaciones llevadas a cabo hasta ahora, los chicos no están escolarizados en ningún centro educativo del territorio nacional y el padre desconoce cuál es su estado de salud, tal como asegura su letrada, Gemma González Calvo.
Vicente Lastra y María Eugenia Álvarez se divorciaron en julio de 2007. En ese momento, comenzó un reguero de recursos judiciales que han derivado en la actual situación. La Audiencia Provincial de Asturias dictó hace tres años una sentencia para regular el régimen de comunicaciones y estancias de los hijos con sus padres, según la cual, Lastra tenía derecho a ver a los niños todos los fines de semana alternos desde el viernes por la tarde hasta el lunes por la mañana, además de cuatro horas diarias los martes y jueves, y durante la mitad de las vacaciones escolares de Navidad, Semana Santa y verano. Unos requisitos que la madre nunca respetó de manera estricta.
El 17 de diciembre de 2008, Álvarez presentó una denuncia en el Juzgado de instrucción número 1 de Castropol contra su ex marido por presuntos abusos sexuales contra su hija. Tras la correspondiente instrucción, que incluyó diversos informes psicosociales, esta demanda fue archivada y la medida cautelar que prohibía al hombre disfrutar del régimen de visitas quedó anulada. La Audiencia Provincial confirmó la inexistencia de esos abusos, tras el recurso presentado por la progenitora.
A pesar de ello, Álvarez impidió de nuevo de forma sistemática los encuentros de los niños con su ex marido. Por este motivo, Lastra tramitó el 1 de septiembre de 2009 un escrito ante el Juzgado de primera instancia número 8 de Gijón para solicitar «la inmediata entrega de los menores» con el fin de gozar de su compañía, en virtud de lo dictado tras el divorcio. El juez de familia citó a ambas partes para una vista oral, pero la mujer no acudió. Esta actitud propició otro fallo que anulaba la comunicación y estancia de la madre con los niños, que deberían convivir desde ese momento con el varón.
Es en ese momento cuando saltan todas las alarmas, ya que la mujer no da señales de vida y no cumple la orden judicial. Por eso, Lastra presenta el 25 de septiembre de 2009 una denuncia en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de El Natahoyo por la desaparición de los pequeños. A raíz de eso, se inician los trámites de búsqueda y captura contra Álvarez, sin que los cuerpos de seguridad del Estado hayan podido dar con ella por el momento. Según la parte demandante, la abogada de la acusada conoce perfectamente su actual paradero, pero se acoge al secreto profesional para no proporcionar ningún dato sobre el caso.
Prueba de que existe este contacto entre letrada y cliente sería la contestación que remitieron contra otra demanda presentada por Lastra en marzo de 2010, que pedía la modificación de las medidas acordadas por la sentencia de divorcio, debido a que sus hijos «se encontraban secuestrados» y que derivó en un nuevo fallo judicial que privó a la mujer de la patria potestad y atribuyó al hombre la exclusiva guarda y custodia; derechos éstos de los que aún no ha podido disfrutar. Esta medida ha sido de nuevo recurrida por la madre, a través de su abogada, por entender que el titular del juzgado número 8 de Gijón es «un prevaricador y que dicta resoluciones de forma arbitraria y al margen de todo procedimiento», según explica el demandante. La vista oral por este nuevo caso tendrá lugar en los próximos meses.
Queda ahora la duda de si la mujer acudirá al Juzgado o decidirá no presentarse, tal como ha ocurrido en las últimas ocasiones. Ante esta situación, el padre confía en que, en última instancia, las investigaciones abiertas consigan localizar a la acusada para poder ver a sus hijos quince meses después de la última visita. La abogada Gemma González Calvo, que defiende habitualmente los casos de la Asociación de Padres Divorciados y Separados de Asturias, insistió ayer en que «las investigaciones llevadas a cabo confirman que los niños no están escolarizados». Aun así, advierte de que si lo estuvieran, el centro escolar debería rendir cuentas por haberlos admitido como alumnos, ya que la matriculación se habría realizado sin la previa obtención de los preceptivos expedientes escolares, «que se encuentran retenidos por orden judicial». Sería un capítulo más de esta truculenta historia que tiene como tristes e involuntarios protagonistas a dos menores.
http://www.lne.es/gijon/2010/11/17/juzgado-busca-mujer-huir-hijos-evitar-vean-padre/995251.html
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