Kidetza ha informado hoy en un comunicado de la situación de las separaciones y divorcios en Euskadi durante 2010, con datos del Consejo General del Poder Judicial.
Según estos datos, en el año 2010 ha habido en el País Vasco 2.986 divorcios o separaciones consensuadas o de mutuo acuerdo, el 63,94 por ciento, mientras que los no consensuados o llevados al contencioso (a los juzgados) han sido 1.684, el 36,06 por ciento.
Estas cifras suponen que han bajado un poco las separaciones y divorcios en Euskadi en 2010 (52 menos, un 1,1 %) con relación al año anterior.
A pesar de la bajada del número de divorcios, han subido muy ligeramente en Euskadi los recurso al juzgado, el 0,086 % de aumento respecto de 2009.
Según Kidetza, el aumento de los litigios ante el juzgado se ha debido a la situación económica, con matrimonios que al comienzo de la crisis no decidieron divorciarse por motivos económicos pero que han acabado separándose por la vía del contencioso.
Además, ha explicado que los problemas económicos han incidido en un aumento de la conflictividad de la pareja al separarse o divorciarse.
Así, la dificultad de acceder a una vivienda después de la separación o divorcio ha aumentado de forma importante los litigios, con el objetivo de quedarse una de las partes con el uso del hogar conyugal, "utilizando en esa pelea a los menores", ha lamentado Kidetza.
Por otra parte, ha bajado la edad media de los divorcios y el aumento de las peticiones de custodia compartida. Según Kidetza, el tramo mayoritario de edad de las parejas que se divorcian es el comprendido entre 35 y 45 años, con un promedio de uno o dos hijos, y ambos desean continuar cuidando y relacionándose con sus hijos.
De ahí que hayan aumentado las peticiones de custodia compartida, pero, dado que solo es posible de mutuo acuerdo y una de las partes puede vetar la petición de la otra, han aumentado de forma importante las peticiones de custodia compartida de forma contenciosa, aunque no así su concesión.
Esta federación ha alertado de que la crisis está generando otros problemas, ya que "la necesidad de vivienda para el progenitor que sale del hogar esta generando auténticos dramas humanos", se dejan de pagar los créditos hipotecarios y aumentan los impagos de pensiones.
Como medidas propuestas para reducir estos problemas, esta asociación ha propuesto la construcción de viviendas de alquiler social para las personas divorciadas, donde puedan alojar dignamente a sus hijos, así como la puesta en marcha de un fondo de garantía social para situaciones de impago de pensiones alimenticias.
http://www.abc.es/agencias/noticia.asp?noticia=819093
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