Calatayud pide un pacto por el menor, un término medio entre derechos y deberes

Domingo, 2 de Junio, 2013
Enlace con video de una conferencia reciente de Emilio Calatayud:
- El juez Calatayud clama contra un sistema que "confunde un cachete con maltrato"

16.02.2013
El juez de Granada llena el salón del hotel Guadacorte para la conferencia ofrecida por Attendis

Calatayud, en el centro de la mesa, durante la conferencia de Attendis.

El juez de menores de Granada conocido por sus sentencias ejemplarizantes, Emilio Calatayud, pidió ayer a las autoridades un pacto para encontrar el término medio entre los derechos y los deberes que tiene el menor para educarle. En explicar su punto de vista sobre el papel de la familia, de la escuela y de la crisis en la formación basó ayer el magistrado la conferencia ofrecida en el hotel Guadacorte de Los Barrios organizada por Attendis para padres y amigos de los colegios Puertoblanco y Montecalpe bajo el título Autoridad con los hijos: ¿dónde están los límites?
Calatayud dirigió su discurso sobre las leyes en las que basa sus sentencias: la Constitución del 78, la Ley de Protección Jurídica del Menor y la conocida como Ley del Menor. "En este país no hay términos medios. Antes, los menores no tenían derechos y a partir del 96 tienen todos los derechos de los ciudadanos, que está muy bien, pero también tienen unos deberes", indicó Calatayud, que bromeó al explicar que él ha sido un "hijo preconstitucional" y un "padre postconstitucional". De la autoridad al diálogo con el niño y los cambios que ha notado han sido abismales, sin término medio.
"En materia de menores estamos todos implicados, la familia sigue siendo la base de su educación y cuando un menor llega al juzgado, el problema está en los padres", sentenció el juez en un discurso muy ameno que arrancó risas e incluso aplausos en muchos momentos, sobre todo al recordar su conocida anécdota del niño de tres años al que no hay manera de enseñar que no debe meter los dedos en un enchufe sin ser severo para evitar el peligro. Con un cachete, que no maltrato.
"Yo soy preconstitucional y cuando yo era pequeño era más fácil ser padre. Mi padre decía 'a las 10:00 aquí' y era a las '10:00'. Yo siempre digo que no soy ni amigo ni colega de mis hijos. Soy su padre, entre otras cosas, porque si no dejaría a mis hijos huérfanos", manifestó.
Calatayud insistió en que él no da consejos para ser padres. Sí leyó su decálogo para el objetivo contrario: formar a un pequeño delincuente en casa, que se basa, principalmente, en dotar de derechos al menor sin responsabilidades ni obligaciones. Reglas que convertirán al hijo en un "pequeño tirano y, con el tiempo, en un auténtico chorizo".
El juez reconoció que, con la crisis, se están recuperando ciertos valores con la vuelta de los padres a casa y incluso están volviendo a la escuela quienes la dejaron para ir a la obra. "El único delito que está subiendo como la espuma es el maltrato de hijos a sus padres, entre familias de clase media y media-alta. Nunca he juzgado a un gitano por eso", afirmó el conferenciante.
Comentó los peligros de las adicciones a las drogas, al juego, la telefonía móvil y la informática y habló de la necesidad de corregir razonable y moderadamente a los hijos, como ya permiten las leyes actuales, sin confundir autoridad y autoritarismo y ofreciendo siempre la presunción de veracidad al profesor. Todo un discurso de sentido común, en el que contó que el pasado año condenó a 21 chavales a aprender a leer y a 200 a sacarse el título de Secundaria.

http://www.europasur.es/article/algeciras/1461486/calatayud/pide/pacto/por/menor/termino/medio/entre/derechos/y/deberes.html