La disciplina es una parte importante de la crianza de los hijos, donde se les debe enseñar a cumplir y respetar reglas, ya que en la sociedad y en el mundo hay muchas de ellas y tenemos que aprender a seguirlas. Algunos hijos responden más fácilmente que otros a lo que le dicen los padres, y en algunos casos puede ser todo un reto lograr que un hijo obedezca. El problema mayor se da cuando los padres no se ponen de acuerdo en las normas que le darán a sus hijos, desautorizándose entre ellos y dejando el espacio para que el hijo aproveche para crear sus propias reglas.
En EntrePadres te contamos por qué es importante que los padres lleguen a un acuerdo en la forma en que criarán a sus hijos. Un tema que se debe conversar incluso cuando se planea tener familia.
¿Cuándo deben ponerse de acuerdo los padres?
Es importante que siempre conversen la forma en que educarán a su hijo, pero el cómo hacerlo dependerá de la edad del niño. Cuando los hijos son pequeños, lo más importante es que los cónyuges sean coherentes entre sí. Ya sean padres divorciados, deben llegar a un acuerdo de cómo criar al hijo, para no desautorizarse.Los niños pequeños (hasta los seis años) se confunden fácilmente cuando un padre tiene unas reglas y el otro no pide que las cumpla. Esto se debe a que a esta edad los niños ven al mundo en términos absolutos, en “blanco y negro”, por lo que para ellos, un padre tendrá la razón y el otro estará equivocado, socavando el respeto, después de un tiempo, por el padre que parece estar en lo incorrecto.
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¿Cómo ponerse de acuerdo en la educación de los hijos?
Un punto importante para hacerlo es hablar con el cónyuge donde los hijos no escuchen, por ejemplo, si un hijo le pregunta a sus padres si se puede realizar un tatuaje, es mejor conversarlo en privado antes de dar una respuesta por separado. Puede que la situación cause un conflicto entre los padres y es más complicado para los hijos ver que los padres discuten por su causa.Es difícil no querer tener la razón, pero la educación de un hijo no es una batalla de poder, sino que se trata del bienestar del hijo y en eso es lo que ambos padres deben enfocarse. La comunicación entre los padres es muy importante, aunque estén divorciados y no se quieran ni ver, ya que los hijos siempre los unirán y su educación será determinada en gran medida, por lo que hagan sus padres, por los ejemplos que les den y las decisiones que tomen.
Se debe tener cuidado en que los hijos no desarrollen resentimientos contra ninguno de los padres, lo que se puede hacer demostrándoles amor y logrando el equilibrio entre el ser autoritario y demasiado condescendiente.
http://www.entrepadres.com/2011-10-06/3762/disciplina-de-los-hijos-un-tema-a-conversar
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