Custodia compartida

Miércoles 20 de julio de 2011  
Antonio Gómez Molina

Representantes de la plataforma gallega Custodia Compartida en Galicia Xa acudieron el viernes día 8 de julio a la unidad móvil que el Sergas instaló en la calle Arzobispo Lago de Vilagarcía de Arousa para donar sangre, dentro del conjunto de acciones reivindicativas que lleva a cabo: "Igual que nos gusta que se solidaricen con nuestra problemática, también queremos mostrarnos solidarios".
La asociación está llevando a cabo una recogida de firmas que enviarán a la Consellería de Presidencia para impulsar la creación de una ley de custodia compartida en la comunidad autónoma.
También lleva la iniciativa de hacer concienciación ciudadana sobre la grave situación que padecen los padres divorciados, en relación a los hijos: "La custodia compartida es un modo simple de prevenir la aparición del Síndrome de Alienación Parental, considerado como una forma de maltrato infantil".
La plataforma lleva tiempo reuniéndose con diversos partidos políticos para lograr su apoyo en la causa, pero para que estos se sientan respaldados por la sociedad necesitan reunir un número de firmas que demuestre la aceptación de la medida por parte de la población. De momento han conseguido unas 16.000 firmas, superando su objetivo inicial de 15.000, pero seguirán con la recogida, ya que cuantas más firmas, más fuerza tendrá su iniciativa.
Hoy en día un 85% de las custodias son adjudicadas a la madre. Sorprende que, contra todo pronóstico, son las mujeres las que más han mostrado su apoyo a la asociación gallega, ya que la adjudicación de la custodia exclusiva a la madre conlleva esfuerzos y dedicación que inciden negativamente en la carrera laboral de las madres, provoca en ellas una situación de desgaste físico y emocional tremendo y la anclan a una vida con escasa participación social por falta de tiempo o ganas.
"No parece muy lógico que se nos demande más participación en las tareas domésticas y del cuidado y educación de nuestros hijos durante el matrimonio y que, una vez divorciados, esas mismas personas quieran apartarnos de los hijos impidiéndonos participar de una labor que deseamos hacer".
Además, con las custodias exclusivas, el progenitor custodio sesga, a veces involuntariamente, la educación de los hijos, a los que impide tomar conciencia de los roles paterno y materno en igualdad de importancia de sus valores, potenciándose uno en contra del otros. Ello produce en los menores diferentes carencias afectivas, emocionales y psicológicas que en muchos casos son perniciosas en el desarrollo y evolución de los mismos, ya que fomentan una elaboración errada de sus sentimientos y les predisponen a fracasos de sus futuras vidas de pareja por la pérdida de referencias de comportamiento.
La asociación CCGX opina que no puede tenerse un planteamiento de partida sano en una situación de ruptura de pareja cuando uno de los progenitores posee una posición de ventaja, desde la que toda negociación o acuerdo le supone "perder privilegios". Para la madre son de forma automática los hijos, la casa, la pensión..., para el padre la hipoteca, la casa alquilada, las visitas de fines de semana y poco más. Solo será posible llegar a acuerdos que beneficien a toda la familia cuando se "negocie" de igual a igual.
En definitiva, la custodia exclusiva es una rémora del pasado que solo causa dolor y sufrimiento en los hijos y en los progenitores "visitadores", que es en lo que a menudo se convierten los papás, contra su voluntad, lo que supone un gran sufrimiento para los padres.
http://www.farodevigo.es/cartas/2011/07/20/custodia-compartida/564530.html