Rafael Mendoza López Jueves, 23 de Junio de 2011
Asegurar a los hijos de padres divorciados o separados que cuenten con una vivienda estable, es el fin de las reformas a tres cuerpos de ley aprobadas ayer por todas las bancadas políticas en la Asamblea Legislativa.
Los legisladores reformaron con 65 votos los códigos Civil y de Familia, y la Ley Procesal de Familia, para obligar a los padres que dejan un hogar donde aún viven sus hijos y su pareja a pagar un porcentaje de las cuotas para la compra o alquiler de dicha vivienda, según lo determine un juez.
Este es un beneficio que, al igual que la cuota alimenticia para los hijos, genera compromisos para los padres que al incumplirlos tendrán penalizaciones que ya establece la ley, entre ellas la incapacidad de obtener licencias de conducir y de armas, préstamos mercantiles y el pasaporte.
Para que este beneficio surta efecto, las reformas contemplan que una unión no matrimonial podrá ser declarada como tal a partir de uno en lugar de tres años de convivencia entre las parejas, tal como lo establecía el artículo 118 del Código Civil.
Por otra parte, las enmiendas permiten que la Procuraduría General de la República se ponga a disposición para que los progenitores puedan llegar a un acuerdo. De lo contrario, se dan más facultades a los juzgados de Paz para que puedan dirimir estos casos.
Los legisladores coincidieron en que este tipo de cambios legales están pensados en función de los menores, en vista de que la vivienda es un derecho universal consagrado en leyes y tratados internacionales.
Además, los cambios a las tres normativas respaldan que si el cónyuge que deja el hogar no quiere que sus hijos vivan en la casa actual, deberá garantizarles otra vivienda digna para ellos y cualquiera de los padres.
Por su parte, la diputada de ARENA, Mariella Peña Pinto, aseguró que las reformas no son de carácter retroactivo, por lo que no surtirán efecto en los casos de separaciones y divorcios efectuados antes de la entrada en vigencia de las mismas. "Mujer, hoy damos tus votos para que tengas una vivienda digna para tus hijos y tus hijas", dijo la legisladora.
Sin embargo, Peña Pinto sostuvo que en los casos de infidelidad de la pareja será el juez quien determine qué régimen se establecerá después de esa ruptura conyugal.
De acuerdo con el secretario general y diputado del PDC, Rodolfo Parker, no existe en los países de Latinoamérica este tipo de beneficios. "La virtud de esta reforma es ese avance de connotación social que traerá enormes beneficios", dijo el pedecista.
A juicio de Emma Julia Fabián, del FMLN, esta enmienda es un complemento de la ley contra la violencia hacia las mujeres que ya fue aprobada por los legisladores. Asimismo, el partido de izquierda hizo un llamado a los jueces para que cumplan con las enmiendas.
"Consideramos que es una ley beneficiosa, pero además muy necesaria para que hagamos conciencia de las obligaciones que implican ser padres", indicó el diputado del PCN, Ciro Alexis Zepeda.
http://www.elsalvador.com/mwedh/nota/nota_completa.asp?idCat=6329&idArt=5951158
Los legisladores reformaron con 65 votos los códigos Civil y de Familia, y la Ley Procesal de Familia, para obligar a los padres que dejan un hogar donde aún viven sus hijos y su pareja a pagar un porcentaje de las cuotas para la compra o alquiler de dicha vivienda, según lo determine un juez.
Este es un beneficio que, al igual que la cuota alimenticia para los hijos, genera compromisos para los padres que al incumplirlos tendrán penalizaciones que ya establece la ley, entre ellas la incapacidad de obtener licencias de conducir y de armas, préstamos mercantiles y el pasaporte.
Para que este beneficio surta efecto, las reformas contemplan que una unión no matrimonial podrá ser declarada como tal a partir de uno en lugar de tres años de convivencia entre las parejas, tal como lo establecía el artículo 118 del Código Civil.
Por otra parte, las enmiendas permiten que la Procuraduría General de la República se ponga a disposición para que los progenitores puedan llegar a un acuerdo. De lo contrario, se dan más facultades a los juzgados de Paz para que puedan dirimir estos casos.
Los legisladores coincidieron en que este tipo de cambios legales están pensados en función de los menores, en vista de que la vivienda es un derecho universal consagrado en leyes y tratados internacionales.
Además, los cambios a las tres normativas respaldan que si el cónyuge que deja el hogar no quiere que sus hijos vivan en la casa actual, deberá garantizarles otra vivienda digna para ellos y cualquiera de los padres.
Por su parte, la diputada de ARENA, Mariella Peña Pinto, aseguró que las reformas no son de carácter retroactivo, por lo que no surtirán efecto en los casos de separaciones y divorcios efectuados antes de la entrada en vigencia de las mismas. "Mujer, hoy damos tus votos para que tengas una vivienda digna para tus hijos y tus hijas", dijo la legisladora.
Sin embargo, Peña Pinto sostuvo que en los casos de infidelidad de la pareja será el juez quien determine qué régimen se establecerá después de esa ruptura conyugal.
De acuerdo con el secretario general y diputado del PDC, Rodolfo Parker, no existe en los países de Latinoamérica este tipo de beneficios. "La virtud de esta reforma es ese avance de connotación social que traerá enormes beneficios", dijo el pedecista.
A juicio de Emma Julia Fabián, del FMLN, esta enmienda es un complemento de la ley contra la violencia hacia las mujeres que ya fue aprobada por los legisladores. Asimismo, el partido de izquierda hizo un llamado a los jueces para que cumplan con las enmiendas.
"Consideramos que es una ley beneficiosa, pero además muy necesaria para que hagamos conciencia de las obligaciones que implican ser padres", indicó el diputado del PCN, Ciro Alexis Zepeda.
http://www.elsalvador.com/mwedh/nota/nota_completa.asp?idCat=6329&idArt=5951158
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