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Carmen Gavilanes y Leslie Loubeau, abuelos de un niño de tres años que reside con su madre en Vigo, han impulsado en Ponferrada una protesta para exigir un cambio en la ley que favorezca la custodia compartida de los menores que se encuentran en la misma situación que su nieto.http://www.atlantico.net/noticia/193438/abuelos/piden/custodia/compartida/
Según han explicad, el pequeño 'pasa 26 días al mes con su madre y solo 4 con el padre'. La intensa lluvia caída en la localidad leonesa no ha impedido que hayan permanecido varias horas en el centro de la ciudad repartiendo octavillas, en compañía de su hijo y de otras personas que se hallan en circunstancias semejantes, para concienciar a la población de la importancia que la custodia compartida tiene para los niños que 'necesitan tanto a sus madres como a sus padres'.
Ataviados con camisetas en las que podía leerse 'Custodia Compartida. Los hombres también pueden querer y criar a sus hijos. No más niños separados de una de sus familias' han pretendido concienciar a la población de una problemática que sufren muchas familias españoleasas.
'La custodia compartida es una necesidad para la familia', ha subrayado en declaraciones a Efe Carmen Gavilanes, quien ha recordado que suele ser la mujer la que se beneficia de una ley 'discriminatoria'. Gavilanes ha defendido una normativa que proteja a aquellos niños que, a su juicio, se quedan 'huérfanos de padre' tras un proceso de divorcio y también que se tenga en cuenta que los menores necesitan tanto a su madre como a su padre 'para desarrollarse íntegramente'.
La mujer ha recordado que su nieto, que vive con su madre en Vigo llora cada vez que se despide tanto de su padre, como de sus abuelos, a los que ve 'dos fines de semana al mes', lo que le ha servido de ejemplo para explicar que este tipo de situaciones no dañan solo al menor y a uno de los progenitores, sino a toda su familia.
'La madre puede ser muy mala con el padre, pero muy buena con el hijo, y el padre lo mismo', ha defendido Carmen Gavilanes, quien ha subrayado que seguirán luchando y no ha descartado, incluso, llegar hasta el Tribunal de Estrasburgo para defender lo que considera un derecho de los menores.
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