BRUSELAS, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
La presidencia española de la UE está "recabando apoyos" y cuenta ya con el respaldo de "varios" Estados miembros para que la igualdad de género sea una prioridad en la agenda de la UE y poder así impulsar este semestre iniciativas como el Observatorio europeo sobre la violencia de género o una orden de protección europea.
Así lo explicó a los medios la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, al término de su primera comparecencia ante la comisión de la Mujer del Parlamento Europeo. El objetivo de Aído es que los ministros de Empleo y Política Social de la UE aprueben en su reunión de marzo un texto de conclusiones que defienda estas medidas.
Una de las claves, según la ministra, será la creación de un Observatorio europeo sobre la violencia de género que proporcione "indicadores comunes y datos fiables" para que los Estados miembros puedan enfrentarse a esta "lacra".
Sobre esta cuestión, la ministra española dejó claro que "no se trata de crear una nueva estructura u organismo, sino de tener datos y estadísticas fiables que podamos compartir". También servirá para la "puesta en común" de las mejores prácticas para "erradicar la violencia contra las mujeres".
El segundo pilar de la propuesta que España defenderá como presidencia en esta reunión será la orden europea de protección, para la que ya cuenta con el apoyo de otros doce Estados miembros, pero que debe ser desarrollada por los ministros de Justicia de la UE.
En este caso, Aído explicó que el objetivo es "homogeneizar el nivel de protección" de las víctimas de delitos, incluido la violencia de género, en todo el territorio comunitario para "evitar la impunidad del agresor" que viaja a otro país.
Además, apoya la creación de un número de teléfono "único y gratuito" a escala europea para la asistencia e información a las víctimas (116-016).
La aprobación de estas medidas "concretas" es un paso "decisivo" para el que la presidencia española trabaja "codo con codo" con los Estados miembros y la Comisión Europea, indicó Aído en su comparecencia, en la que precisó que Bruselas prepara un informe para "estudiar la viabilidad" de las propuestas para adecuarlas a las legislaciones nacionales.
En su intervención ante los eurodiputados, Aído dijo que la Igualdad debe ser planteada como un elemento "transversal" de las políticas europeas, incluidas aquellas destinadas a la recuperación económica y el empleo. La igualdad de género "no es sólo una cuestión de justicia, sino que es rentable" desde el punto de vista empresarial, defendió.
Por ello consideró que la nueva estrategia europea para la economía, bautizada como estrategia 2020, debe incluir entre sus objetivos "incorporar plenamente" a las mujeres en el mercado de trabajo, "en igualdad de condiciones a sus compañeros varones" y como factor para "fortalecer el crecimiento".
Entre las principales barreras que deben derribarse figuran las dificultades de acceso y mantenimiento en el mercado laboral, la conciliación, la brecha salarial entre hombres y mujeres, los estereotipos de género que "sesgan" el desarrollo profesional de las mujeres y la falta de féminas en los puestos de "responsabilidad política y económica", enumeró la ministra.
Sobre la directiva de maternidad que aún debe ser votada en la Eurocámara, Aído declaró el "pleno apoyo" de España a la "protección de la salud y los derechos de las mujeres trabajadoras" que están embarazadas o acaban de ser madres.
La ministra finalmente recordó los principales eventos previstos en su área durante el semestre de la presidencia española, entre los que destacó "la Cumbre informal de Ministras de Igualdad" de la UE que se celebrará en Valencia los días 25 y 26 de marzo.
DIRECTIVA DE IGUALDAD DE TRATO
Aído aprovechó su comparecencia ante la Eurocámara para abordar las dificultades que otra norma europea, la directiva sobre igualdad de trato, está encontrando en algunos Estados miembros para salir adelante. Se trata de un dossier que ha heredado de presidencias anteriores y que pretende crear un marco común europeo para la protección frente a múltiples discriminaciones, incluido por sexo, religión o raza.El Ejecutivo español es consciente de que existen "importantes reservas" en algunos gobiernos nacionales con respecto a la base jurídica de esta norma, pero considera "inadmisible" que en la UE haya diferencias ante la discriminación "en función de su causa".
Por eso la directiva de igualdad de trato es una "prioridad" para este semestre de presidencia española, cuyo Gobierno no quiere "invadir competencias", pero tampoco quiere "que ningún ciudadano pueda ser discriminado".
La anécdota de la sesión parlamentaria sobre Igualdad de género la puso el eurodiputado socialista belga Marc Tarabella, quien, recordando una opereta titulada 'La Bella de Cádiz', dijo que hasta escuchar a la ministra pensaba que "la Bella de Cádiz era un personaje imaginario, pero ahora veo que existe y, además, se le pueden hacer preguntas". Un comentario sobre el que la ministra prefirió "no profundizar y tomar como un cumplido".
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