El Juez de Menores de Granada, Emilio Calatayud, defendió ayer en Molina de Segura la necesidad de alcanzar un pacto social que sirva para redefinir los derechos y obligaciones de los menores, y dé soluciones a los problemas legislativos que actualmente existen para acabar con las contradicciones sobre lo que pueden y no pueden hacer los menores.
Calatayud, que pronunció en la tarde de ayer en el salón de actos del colegio del paseo Rosales una conferencia sobre el papel de los padres en la educación de sus hijos, dijo que España posee “un complejo de joven democracia”, donde se ha pasado de una sociedad en la que los menores sólo tenían deberes, a otra donde se han dado derechos sobre derechos.
Esta situación, según el Juez de Menores de Granada, ha llevado a confundir una bofetada con el maltrato, y ha hecho que los menores están crecidos ante los padres, unos progenitores que encuentran dificultades para imponer su autoridad, al igual que ocurre con los profesores.
El juez puso de manifiesto su desacuerdo con el proyecto de ley del aborto, donde se contempla la posibilidad de que una menor de 16 años pueda abortar sin consentimiento de sus padres, al igual que rechazó que una menor de 13 años pueda mantener relaciones sexuales.
Calatayud afirmó que la Ley del Menor es necesario que se aplique y se pongan todos los medios necesarios para ello, y comentó que antes de cualquier cambio debería realizarse un estudio serie sobre el éxito o fracaso de su aplicación, “un estudio que determine cuantas personas que han pasado por la justicia de menores han terminado en la justicia de adultos”.
Los menores, explicó el juez, cometen fundamentalmente los delitos de robo, robo con violencia y lesiones, aunque están apareciendo nuevos delitos típicos de la clase media-media alta como el maltrata a los padres y los delitos relacionados con las nuevas tecnologías.
El 80 por ciento de los jóvenes cometen delitos, pero eso no significa, según Calatayud, que sean delincuentes. El perfil de delincuente sólo lo tiene el 20 por ciento, de los que la mitad “son carne de cañón”.
Calatayud comentó que el 82 por ciento de los menores con perfil de delincuente han pasado por un fracaso escolar, por lo que defendió la necesidad de que los menores estén en la escuela, y dijo no aceptar la expulsión de los centros educativos como medida sancionadora educativa ante un mal comportamiento.
Emilio Calatayud acusó a las televisiones de falta de ética profesional al primar más los intereses de audiencia que los derechos de los menores, algo por lo que reclamó la actuación de oficio del Fiscal General del Estado para proteger a los menores.
Emilio Calatayud, que estuvo en Molina de Segura invitado por la Fundación de Estudios Médicos abriendo el programa de actos organizado para conmemorar el décimo aniversario del Consejo Escolar Municipal, es conocido por sus sentencias eminentemente educativas y ejemplarizantes basadas en la fórmula “justicia y sentido común”.
http://radiomolina.com/noticias/Ficha.aspx?FrmIdNot=3770
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