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miércoles, 8 de junio de 2011

Conceden al padre la custodia de una niña de 9 años que lleva un año ingresada en un centro menores de Vigo

Limita los contactos de su madre a una visita semanal de una hora y a una llamada telefónica de la misma duración
8/6/2011
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El Juzgado de Familia número 5 de Vigo ha concedido la custodia de una niña de 9 años que lleva un año ingresada en un centro de menores a su padre y se la ha retirado a su madre, a la que limita los contactos con su hija a una visita semanal de una hora y a una llamada telefónica de la misma duración. Estas restricciones se mantendrán durante al menos cuatro meses y a partir de ahí podrían modificarse en función de cómo se produzcan los contactos tanto presenciales como telefónicos, de cuya evaluación se encargará el Servicio de Familia y de Menores de la Xunta, informó a Efe el abogado del padre de Sara.
La conclusión de la sentencia con fecha del 31 de mayo es que la custodia paterna es la medida que mejor puede garantizar el bienestar integral de la niña, cuyo ingreso en un centro tutelado decretó la jueza como medida cautelar, en principio por 21 días, ante el incumplimiento del régimen de visitas por parte de la madre.
La excusa que esgrimía la progenitora eran los supuestos abusos sexuales que había sufrido la menor por parte de su exmarido, al que denunció hasta en cinco ocasiones entre 2004 y 2007, y en todos los casos fueron sobreseídas y archivadas. El padre, por su parte, también había denunciado a la madre, por la vía penal, por falsas acusaciones y por incumplimiento del régimen de visitas, y en ambas ocasiones la progenitora quedó absuelta.
El Juzgado de Familia número 5 de Vigo destaca en su sentencia que la relación de la menor con su padre empeoró por la «inducción negativa» de la madre, y que cuando relataba los supuestos abusos de su progenitor sus manifestaciones «parecían aprendidas». Asimismo, recoge que la madre sometió a la niña a múltiples exploraciones médicas, ginecológicas y psicológicas «injustificadas» y que todos los trastornos emocionales, fobias, problemas gástricos y vómitos desaparecieron poco después de pasar a residir en el centro de menores en julio de 2010.
La Fundación Campus Stellae, que ofrece asesoramiento y ayuda a la madre de la menor, sostiene que a la niña le han practicado un «borrado de memoria» mientras ha permanecido en el centro Mensajeros de la Paz. Esta institución viene denunciando una «cadena de errores procedimentales» en el tratamiento de las denuncias de la madre por supuestos abusos sexuales del padre, de las que ha dado traslado al Valedor do Pobo y al Consejo General del Poder Judicial y ha solicitado la mediación de la Xunta.
Su directora, Nuria Pereira, ha manifestado a Efe su «incomprensión» y «sorpresa» ante lo que considera «un disparate», y ha considerado que el informe en el que se basa la sentencia contiene «cosas que no están bien expresadas», sin entrar en más detalles. Pereira ha revelado, asimismo, que hace apenas una semana se celebró un juicio en Santiago de Compostela en el que el padre denunció a la Fundación Campus Stellae por injurias y calumnias en torno al caso de la menor viguesa.

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