INÉDITO FALLO EN CASO DE CRIATURAS EN SITUACIÓN DE CALLE
En un fallo inédito, la jueza de la Niñez María Teresa Franco dispuso la separación de cinco niños con edades de 11, 9, 6, 4 y 2 años de su madre, por maltrato. Las criaturas, que eran obligadas a mendigar en las calles y se encontraban con graves problemas de salud y también sicológicos, deben ser llevados al Hogar Tesape Porã, como medida urgenteDomingo 7 de Agosto de 2011
Niños mayores cargan a sus hermanitos, para pedir limosnas a conductores. Una constante en distintas arterias de nuestra capital y ciudades aledañas.
La medida fue solicitada por la defensora de la Niñez Marina Soerensen, ante los constantes maltratos con que Cinthia A. somete a sus hijos, expuestos a la desnutrición, a la explotación comercial y el frío.
La magistrada tomó la decisión tras corroborar que el Estado, a través del programa Abrazo de la Secretaría de la Niñez, proveyó a Cinthia de todos los recursos necesarios para que pueda asistir a sus hijos y sacarlos de la miseria extrema en que viven, sin éxito.
Según constancias obrantes en el expediente, Cinthia ha recibido colchones, dinero, medicamentos y alimentos, además de útiles escolares y guardería. La mujer firmó un acuerdo por el cual se comprometió a no exponer más a los niños a la situación de calle, pero no cumplió.
Antes y después de la firma de dicho compromiso los niños eran visualizados en las inmediaciones de la iglesia Santísima Trinidad, desde ahí subían a cantar músicas en los colectivos. La madre, alcohólica, utiliza el dinero para mantener su vicio.
Daños son gravísimos
“Los niños en cuestión, con graves problemas físicos y psicológicos a raíz de los maltratos sufridos, requieren de asistencia material, afectiva y educativa necesaria para superar el daño, ya no de manera ambulatoria, sino de manera total dentro del seno de una institución. Esta asistencia se encuentra dentro de las previsiones del artículo 34 del cuerpo legal citado, por lo que cabe considerarla una medida de protección y apoyo de carácter urgente”, señala el fallo.
La jueza Franco aclara que la medida es de carácter excepcional y provisoria, “a los efectos de preparar, sea su inserción en una familia sustituta o en su propia familia biológica (en caso de superar la madre su alcoholismo y su conducta maltratante), sea su ubicación definitiva en otra institución (en el caso de no rehabilitarse la misma)”.
Informes agregados al expediente, del año 2009, revelan que la vida del menor de los chicos estuvo en riesgo, pues estuvo internado en grave estado por desnutrición y parásitos en más de una ocasión y, pese a la expresa prohibición médica de exponerse a la intemperie, fue nuevamente utilizado para pedir limosnas.
“La misma se encontraba con su hijo S. internado por parásitos y desnutrición, el mismo luego de una semana fue dado de alta. Al día siguiente del alta, fue observado nuevamente en la calle con su hermanita de 10 años, pidiendo plata en los colectivos”, informa María Paula Giangreco, del SNNA, el 12 de mayo de 2009.
La magistrada tomó la decisión tras corroborar que el Estado, a través del programa Abrazo de la Secretaría de la Niñez, proveyó a Cinthia de todos los recursos necesarios para que pueda asistir a sus hijos y sacarlos de la miseria extrema en que viven, sin éxito.
Según constancias obrantes en el expediente, Cinthia ha recibido colchones, dinero, medicamentos y alimentos, además de útiles escolares y guardería. La mujer firmó un acuerdo por el cual se comprometió a no exponer más a los niños a la situación de calle, pero no cumplió.
Antes y después de la firma de dicho compromiso los niños eran visualizados en las inmediaciones de la iglesia Santísima Trinidad, desde ahí subían a cantar músicas en los colectivos. La madre, alcohólica, utiliza el dinero para mantener su vicio.
Daños son gravísimos
“Los niños en cuestión, con graves problemas físicos y psicológicos a raíz de los maltratos sufridos, requieren de asistencia material, afectiva y educativa necesaria para superar el daño, ya no de manera ambulatoria, sino de manera total dentro del seno de una institución. Esta asistencia se encuentra dentro de las previsiones del artículo 34 del cuerpo legal citado, por lo que cabe considerarla una medida de protección y apoyo de carácter urgente”, señala el fallo.
La jueza Franco aclara que la medida es de carácter excepcional y provisoria, “a los efectos de preparar, sea su inserción en una familia sustituta o en su propia familia biológica (en caso de superar la madre su alcoholismo y su conducta maltratante), sea su ubicación definitiva en otra institución (en el caso de no rehabilitarse la misma)”.
Informes agregados al expediente, del año 2009, revelan que la vida del menor de los chicos estuvo en riesgo, pues estuvo internado en grave estado por desnutrición y parásitos en más de una ocasión y, pese a la expresa prohibición médica de exponerse a la intemperie, fue nuevamente utilizado para pedir limosnas.
“La misma se encontraba con su hijo S. internado por parásitos y desnutrición, el mismo luego de una semana fue dado de alta. Al día siguiente del alta, fue observado nuevamente en la calle con su hermanita de 10 años, pidiendo plata en los colectivos”, informa María Paula Giangreco, del SNNA, el 12 de mayo de 2009.
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