27/9/2010
El centro posee salas para los encuentros familiares
El Punto de Encontro Familiar de Ourense cumple diez años. Cuenta con 456 usuarios de los cuales 153 son menores y 389 adultos. Los primeros son los protagonistas. Aunque muchos desconocen su labor, el número de casos ha crecido pasando de 2 en el año 2000, para llegar a los 53 del año pasado. En el presente año 2010 se han incorporado hasta ahora 24 nuevos casos. Situado en San Rosendo, 14, bajo, lo gestiona la asociación sin ánimo de lucro Punto Cero. Es allí donde padres divorciados que no se llevan bien se intercambian a sus hijos menores. Los niños que por allí pasan lo hacen en un 70% debido a situaciones de violencia en sus domicilios y son casos que llegan del juzgado.Hay niños que acuden por enfermedad de los padres, por falta contacto prolongado, porque se ha valorado un posible riesgo para ellos en casa o porque el padre que tiene la custodia se opone a la visita. Otros van porque rechazan al progenitor que no tiene la custodia. Se reciben también niños que tienen que ver a la familia biológica, porque viven con una de acogida. O los que acuden por conflictos en el momento del intercambio. Son desde recién nacidos a adolescentes, hijos de padres de todo el espectro social ourensano. «El niño nunca está solo aquí. Viene con su madre o padre, esperan unos minutos en distintas habitaciones para que los padres no se vean», dice la coordinadora, Andrea Covelo.
Se dan casos de madres que no llevan a sus hijos a las visitas y se meten en líos judiciales. Algunos engrosan sobremanera la carpeta del expediente. «Punto Cero tiene un convenio con la Xunta. No somos funcionarios. Tenemos un educador social, dos trabajadores sociales y un psicólogo», cuenta Covelo. El horario es de miércoles a domingo, de 9.30 a 13.30 y de 16.00 a 20.30 horas. Los menores pasan por este punto derivados del grupo de orientación familiar, 28 en total y por orden del juzgado, es el caso de 86 expedientes. En cuanto a la duración de los encuentros, las sentencias no la suelen fijar. «Hemos hablado con el juzgado porque la gente luego no se marcha ya que le es muy cómodo estar aquí y no asumen que tiene que verse. Se recomienda no estar más de seis meses, a no ser que exista orden de alejamiento», indica la responsable.
Casos dramáticos
Aquí han visto casos dramáticos de niños que los ha tutelado la administración, quitándoselos a sus padres por circunstancias y que se reúnen aquí con ellos, o que se suspenden esas visitas. «Un niño no entiende que porque sus padres no lo vistan bien, o no lo lleven a la escuela, no pueda seguir estando con ellos. Quiere verlos», relata Andrea. Otras situaciones duras, las de menores que lloran porque van con familias de acogida y ellos no lo entienden. Los niños proceden de 16 concellos de la provincia y hay casos de A Coruña, Chantada, Monforte y Pontevedra. El Punto organiza también actividades lúdicas.
http://www.lavozdegalicia.es/ourense/2010/09/27/0003_8749436.htm
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