Me dirijo a usted con el fin de poder denunciar la existencia de denuncias falsas de malos tratos que se están interponiendo por parte de algunas mujeres contra sus parejas. Según mi criterio, y dicho con todo el respeto, dichas mujeres sólo pretenden, sin escrúpulos, beneficiarse de las leyes que protegen a las mujeres realmente maltratadas, obteniendo con ello ciertos beneficios al ser declaradas mujeres maltratadas. Beneficios que se deberían adjudicar, exclusivamente, a las mujeres realmente maltratadas con el fin de que tengan independencia económica, una vivienda digna, y principalmente, estén protegidas ante el maltratador.
Estas denuncias falsas colapsan los juzgados, y hacen pasar al hombre por la humillación de ser detenido, como auténticos delincuentes, ya que no se investiga antes de detener al supuesto maltratador, no teniéndose en cuenta la presunción de inocencia.
Hago un llamamiento a cuantos como yo, estén sufriendo o no este atropello, siendo víctimas de las denuncias falsas de malos tratos por parte de sus parejas.
Hoy me toca a mi, quien no dice que mañana no pueda ser usted la próxima víctima de las denuncias falsas de malos tratos.
Si se depuraran responsabilidades a cuantos denuncian en falso, colaboraríamos para descongestionar los juzgados, y en cuanto a las denuncias falsas por malos tratos, podríamos devolver la confianza a aquellos hombres que no confían en la justicia.
Considero que en la presente ley de protección de la mujer no se contempla la igualdad entre los hombres y las mujeres, a pesar del empeño y los esfuerzos que tantos ponemos para conseguirlo.
http://www.laverdad.es/albacete/v/20100429/opinion/proteccion-mujer-20100429.html
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